G2_Haciendo frente a los cambios estacionales _04
Algunos animales, como las ballenas, comen grandes cantidades de alimentos durante los meses más cálidos. Sus cuerpos pueden almacenar esta energía en forma de grasa corporal.
Durante los meses de invierno, pueden sobrevivir gracias a esta grasa almacenada. Para ahorrar energía, nadan hasta aguas más cálidas. Por ejemplo, muchas ballenas azules pasan sus veranos dándose un banquete frente a las costas de Alaska, donde hay alimento en abundancia. Cuando las temperaturas más frías comienzan a regresar, migran o viajan a aguas más cálidas. Estar en aguas más cálidas les ayuda a conservar energía. Es en estas aguas más cálidas donde también dan a luz a sus crías.